Proemio- Enrique Forniés (Ediciones Tagus)

No sé si a vosotros os pasa, pero a mí de vez en cuando, me da rabia leer un libro y comprobar que no está en todos los escaparates de las librerías españolas.
Soy una amante de la narrativa pura y dura. De esos libros especiales en los que es más importante como te están contando la historia que la historia en sí. Cuando encuentro un libro de esas condiciones automáticamente abro otro y leo ambos a la vez, así me obligo a leer despacito el que ha tocado algo dentro mí.
Y leyendo Proemio ese algo que al principio hace clic luego se va haciendo un hueco y va llenado parte de ti. Esa parte que te gusta llenar cada vez que abres un libro, pero que pocos libros lo consiguen.
Tiene Proemio un narrador que nos cuenta su historia mientras se desnuda. Y cada capa que se deja caer nos permite ver una parte hasta ese momento oculta de su personalidad. Con que suavidad Enrique es capaz de mostrarnos el verdadero carácter de las personas. Sin correr. Casi susurrándonos sus rasgos.
Un triángulo de personajes que dotan al libro de una gran belleza, cuyos vértices componen un poeta con tendencias suicidas, una novia que ve pero que no dice y el narrador, que se autoimpone el papel de redentor.
Porque se centra el autor en una descripción psicológica de los tres, olvidando si son guapos o feos, no nos importa. Pero sí nos  interesan, y mucho, sus debilidades y su defectos. Y esas pequeñas virtudes que salen a la luz cuando los defectos ajenos surgen compensado la balanza narrativa.
Pueblan esta novela, además,  una serio de personajes secundarios que dan la fuerza necesaria a los tres protagonistas, completando una novela de las merecen ser leídas. Y ser leídas además por mucha gente.
Y es que este libro es desde su título una de esas narraciones por las que yo, personalmente, adoro la literatura. Proemio me ha hecho sentir, y eso hoy en día es de agradecer… Así que sólo diré:-Gracias Enrique. Gracias por dejarnos leer tu proemio.